miércoles, 30 de enero de 2013

AYÚDANOS A MEJORAR SUS VIDAS.

PORQUE TU TAMBIÉN PUEDES FORMAR PARTE DE ELLOS, ayúdanos a mejorar sus vidas, ayúdanos a que no se sientan solos...

Tienes muchas formas de colaborar, puedes hacerte socio, padrino, ser casa de acogida, todas ellas son de vital importancia para llevar el refugio adelante pero también puedes ayudarles con tus donaciones, puedes traernos pienso, quesitos para la toma de medicamento, material de limpieza. Actualmente tenemos en nuestro refugio a 250 animales, no imaginas la cantidad de pienso que necesitamos solamente en un mes para alimentar a todos ellos, con tu donación estarás ayudando a su necesidad mas básica, SU ALIMENTACIÓN. Con un acto tan simple como traerles un saco de pienso harás que la vida de nuestros animales tenga mas sentido, no importa la cantidad por poco que sea nuestros peludos te lo agradecerán de todo corazón.

CON UN PEQUEÑO GESTO PUEDES AYUDAR A CAMBIAR SUS VIDAS...!

Puedes traerlo tu mismo al refugio y así conocer a los peludetes, si no puedes venir no te preocupes pasamos a recogerlo, contacta con: comunica@protectoraxativa.




sábado, 26 de enero de 2013

CON LA MULETA VA HACIENDO AGUJERITOS DE PLATA.

Hola amigos queremos empezar el fin de semana compartiendo con todos vosotros este emotivo y hermoso poema de Manuel Benitez Carrasco.

VA DEDICADO A TODOS LOS PELUDITOS QUE SIGUEN VAGABUNDEANDO POR LAS CALLES, DEDICADO A TODOS LOS QUE TUVIERON LA SUERTE DE ENCONTRAR UN REFUGIO O UN HOGAR, DEDICADO A TODOS LOS QUE YA NOS DEJARON...



  1. Con una pata colgando,
    despojo de una pedrada,
    pasó el perro por mi lado,
    un perro de pobre casta.
    Uno de esos callejeros,
    pobres de sangre y estampa.
    Nacen en cualquier rincón,
    de perras tristes y flacas,
    destinados a comer
    basuras de plaza en plaza.

    Cuando pequeños, qué finos
    y ágiles son en la infancia,
    baloncitos de peluche,
    tibios borlones de lana,
    los miman, los acurrucan,
    los sacan al sol, les cantan.
    Cuando mayores, al tiempo
    que ven que se fue la gracia,
    los dejan a su ventura,
    mendigos de casa en casa,
    sus hambres por los rincones
    y su sed sobre las charcas.

    Qué tristes ojos que tienen,
    que recóndita mirada
    como si en ella pusieran
    su dolor a media asta.
    Y se mueren de tristeza
    a la sombra de una tapia,
    si es que un lazo no les da
    una muerte anticipada.

    Yo le llamo: psss, psss, psss.
    Todo orejas asustadas,
    todo hociquito curioso,
    todo sed, hambre y nostalgia,
    el perro escucha mi voz,
    olfatea mis palabras
    como esperando o temiendo
    pan, caricias... o pedradas,
    no en vano lleva marcado
    un mal recuerdo en su pata.
    Lo vuelvo a llamar: psss, psss.
    Dócil a medias avanza
    moviendo el rabo con miedo
    y las orejitas gachas.

    Chasco los dedos; le digo:
    "ven aquí, no te hago nada,
    vamos, vamos, ven aquí".
    Y adiós la desconfianza.
    Que ya se tiende a mis pies,
    a tiernos aullidos habla,
    ladra para hablar más fuerte,
    salta, gira; gira, salta;
    llora, ríe; ríe, llora;
    lengua, orejas, ojos, patas
    y el rabo es un incansable
    abanico de palabras.

    Es su alegría tan grande
    que más que hablarme, me canta.
    "¿Qué piedra te dejó cojo?
    Sí, sí, sí, malhaya".
    El perro me entiende; sabe
    que maldigo la pedrada,
    aquella pedrada dura
    que le destrozó la pata
    y él, con el rabo, me dice
    que me agradece la lástima.
    "Pero tú no te preocupes,
    ya no ha de faltarte nada.
    Yo también soy callejero,
    aunque de distintas plazas
    y a patita coja y triste
    voy de jornada en jornada.
    Las piedras que me tiraron
    me dejaron coja el alma.

    Entre basuras de tierra
    tengo mi pan y mi almohada.
    Vamos, pues, perrito mío,
    vamos, anda que te anda,
    con nuestra cojera a cuestas,
    con nuestra tristeza en andas,
    yo por mis calles oscuras,
    tú por tus calles calladas,
    tú la pedrada en el cuerpo,
    yo la pedrada en el alma
    y cuando mueras, amigo,
    yo te enterraré en mi casa
    bajo un letrero: «aquí yace
    un amigo de mi infancia».

    Y en el cielo de los perros,
    pan tierno y carne mechada,
    te regalará San Roque
    una muleta de plata.
    Compañeros, si los hay,
    amigos donde los haya,
    mi perro y yo por la vida:
    pan pobre, rica compaña.


    Era joven y era viejo;
    por más que yo lo cuidaba,
    el tiempo malo pasado
    lo dejó medio sin alma.
    Y fueron muchas las hambres,
    mucho peso en sus tres patas
    y una mañana, en el huerto,
    debajo de mi ventana,
    lo encontré tendido, frío,
    como una piedra mojada,
    un duro musgo de pelo,
    con el rocío brillaba.

    Ya estaba mi pobre perro
    muerto de las cuatro patas.
    Hacia el cielo de los perros
    se fue, anda que te anda,
    las orejas de relente
    y el hociquillo de escarcha.
    Portero y dueño del cielo
    San Roque en la puerta estaba:
    ortopédico de mimos,
    cirujano de palabras,
    bien surtido de intercambios
    con que curar viejas taras.
    "Para ti... un rabo de oro;
    para ti... un ojo de ámbar;
    tú... tus orejas de nieve;
    tú... tus colmillos de escarcha.
    Y tú, —mi perro reía—,
    tú... tu muleta de plata".

    Ahora ya sé por qué está
    la noche agujereada:
    ¿Estrellas... luceros...? No,
    es mi perro cuando anda...
    con la muleta va haciendo
    agujeritos de plata.



martes, 15 de enero de 2013

XIX Bendición de los Animales

El voluntariado de la SPAX tenemos fechas señaladas en el calendario que esperamos que lleguen con un cariño especial.
Una de las más importantes, sin duda, es el día en que celebramos la festividad de Sant Antoni del Porquet, que este año, será este domingo día 20 de Enero.



Comprobar que tantísima gente comparte un amor incondicional hacia sus animales, es la recarga de energía que justo necesitamos para empezar este nuevo año con los ánimos y fuerza renovados, ya que éstos fueron mermados durante el pasado año, debido a las historias tan tristes que hemos vivido en el 2012.
Perros muy queridos por todos pasaron a formar parte de esas estrellas que brillan al otro lado del puente del Arco Iris (Lluna, Berg, Fita, Cher, Tini, Carlos, Piluca, Dylan, Nala…).
Nos encontramos casos especialmente complicados: la operación de Atenea (la perra con las dos patas traseras fracturas debido a un atropello), el caso de Tango (un perro al que un subidón de Leishmania casi se lo lleva de nuestro lado), Ella (una gatita que llevaba literalmente un ojo colgando), Bonnie (que tiene una enfermedad en la piel rarísima y muy poco común que fue muy difícil de diagnosticar)…
Además, estamos sufriendo la peor época que podemos recordar en cuanto a saturación se refiere: tenemos más de 250 animales en un refugio capacitado para albergar a unos 180 perros.

Está siendo una época dura, muy difícil, con días grises en los que te invade una impotencia descomunal al ser testigo de tanto abandono, en los que llegas a plantearte si vale la pena todo este esfuerzo, ya que la vida del voluntario tiene momentos felizmente inolvidables pero también otros que son todo lo contrario…
Y gracias a días como el domingo, la respuesta es sí.
Vale la pena porque aún hay personas que lo dan todo por sus animales, porque para muchos no son seres inferiores, son exactamente iguales, uno más de la familia.

Vale la pena porque no tiene precio ver a dos compañeros (uno humano y otro canino) que acuden juntos desde hace años a la Bendición de los animales, ambos con paso cansado porque los años no pasan en balde para nadie, pero con la ilusión de la primera vez.

Y sobre todo vale la pena, porque cuando vemos a nuestros perretes adoptados, felices y sanos, que vienen a ser bendecidos con sus nuevas familias, nos recuerdan que “ellos” son el fruto de nuestro esfuerzo, que a pesar de los días grises, la balanza está equilibrada y son el estímulo necesario para continuar con nuestras tareas de voluntarios.

Os invitamos a todos a que nos acompañéis el domingo, no por nosotros, por vuestros animales: ellos merecen este día, una jornada en la que ellos sean los auténticos protagonistas y las personas únicamente sus acompañantes.
Aunque muchos de los animales que acudan a la Bendición seguramente ya sean los reyes de sus casas, se nos presenta la oportunidad de demostrarles públicamente el cariño que les profesamos, así, como lo orgullosos que estamos de que formen parte de nuestra familia.

Si además, tienes espacio y tiempo, podrías darle un compañero consorte a tu mascota haciéndonos de casa de acogida.
En un lado de la plaza, montaremos un Stand en el que además de adquirir nuestro género habitual (mordedores, ropa para mascotas, broches y pulseras artesanos hechos por nuestro voluntariado) encontrarás las típicas medallas de Sant Antoni, el libro “El destino de Cartucho” el cual apoyamos y recomendamos totalmente, así, como recibir todo tipo de información sobre qué es ser casa de acogida.
Acércate e infórmate sin compromiso.


(Se convoca a todas las personas que quieran colaborar en la marcha con los animales, a las 11:00 en la Plaza del Españoleto, ya que ésta, comenzará a las 11:30h.
La Bendición, dará comienzo a las 12:30h., tras el discurso de nuestra presidenta MªCarmen Jachán, las palabras que Don José compartirá con los presentes y la actuación de Pili Cuenca y Julián Quiralte)